Es muy frecuente que los perros tengan en sus intestinos parásitos como lombrices o tenias. En el caso de las lombrices, las pueden adquirir de sus madres que les pasa las fases larvarias a través de la leche o de la placenta. También las pueden obtener de cualquier alimento contaminado con los huevos de estos parásitos. Las tenias suelen infestar a los perros a través de las pulgas o de alimentos contaminados con fases larvarias, casi siempre, carnes mal hechas.

La desparasitación interna consiste en la administración de fármacos para eliminar estos parásitos de nuestras mascotas. Conviene dar tratamientos repetidos mientras que son cachorros y, después, cada tres meses a lo largo de la vida del animal. Todos estos parásitos pueden afectar a los humanos

Hay otro tipo de parásitos que habitan en la superficie del animal , los más frecuentes son las pulgas y garrapatas. Existen fármacos que, aplicados sobre la piel de la mascota, matan estos parásitos y tienen un efecto protector evitando que durante un tiempo los vuelvan a coger. También hay productos que se pueden tomar vía oral y que tienen, igualmente, un efecto duradero de uno hasta tres meses. Existen collares efectivos frente a pulgas y garrapatas y con duración de hasta 8 meses. Tanto las pulgas como, en mayor grado, las garrapatas, son transmisoras de enfermedades potencialmete mortales, por lo cual la protección de los animales frente a ellas es indispensable.

Estos parásitos, además de producir un daño directo sobre los animales que parasitan, les pueden transmitir enfermedades potencialmente mortales como la babersiosis, ehrlichiosis, anaplasmosis, micoplasmosis etc. Pero el aspecto de mayor consideración es que todos estos parásitos pueden pasar a parasitarnos a nosotros: en el caso de las lombrices intestinales y tenias, los huevos que ponen en el intestino de los perros salen con las heces, quedan en el entorno del ano del perro y de ahí pueden pasar al sofá , a las alfombras, a su hocico, a nuestras manos y, así, por medio de cualquier alimento o directamente, a nuestro intestino o enquuistarse en nuestros órganos y músculos. En el caso de los parásitos externos, las pulgas pueden picarnos y las garrapatas también  y pueden transmitirnos las mismas enfermedades que a los animales.

En caso de las lombrices, pueden verse unos filamentos de varios centímetros en las heces, pero el no verlos no quiere decir que no las tenga. Las tenias se pueden observar como granos de arroz que se alargan y encogen . Las pulgas se pueden ver como unos bichitos de varios milímetros que se observan, sobre todo, en las zonas con poco pelo. También es posible ver unas partículas negras que al aplastarlas sobre un papel blanco humedecido dejan un cerco rojizo : son las deyecciones de las pulgas. Estas “cacas” se pueden obtener pasando un peine de púas muy juntas .Las garrapatas se ven como “perlas”clavadas en la piel del animal o como unas arañitas de cuerpo rechoncho de color marrón fijadas también sobre la piel.

Es un situación bastante frecuente : el problema consiste en que las pulgas ponen cientos de huevos que pueden permanecer viables en el entorno durante mucho tiempo. De este modo, aunque tratemos al animal, como van naciendo nuevas pulgas, éstas van subiendo de nuevo a la mascota o a nosotros mismos, en caso de que el animal ya no esté en casa. En estos casos sólo nos queda la opción de tratar el domicilio fumigándolo con productos adecuados

Principalmente el moquillo, la parvovirosis, la hepatitis infecciosa, la tos de las perreras, la leptospirosis , la rabia. Normalmente se utilizan vacunas polivalentes que protegen frente a varias o todas estas enfermedades en una sola inyección

A las seis semanas de vida se les puede administrar la primera vacuna, normalmente se repiten varias dosis de refuerzo, siendo importante que la última recibida en la pauta inicial de vacunación sea aplicada después de las 14-16 semanas para evitar la interferencia de los Anticuerpos maternos pasados al cachorro en el calostro.

En Galicia no es obligatorio, pero se recomienda sobre todo si se viaja fuera de Galicia porque en la mayoría de las comunidades autónomas lo es y siempre es necesaria para salir de España.

Es posible que el día posterior a la vacunación el animal se encuentre menos activo y triste, en rara ocasión, principalmente en gatos, puede haber fiebre. Lo habitual es que a las 48 horas ya esté perfectamente.